EL 'MAQUIAVELISMO' POLÍTICO
Uno de los más graves problemas que experimenta la humanidad en el presente es la corrupción creciente del sistema democrático debido a que la política está dominada por el vicio del 'maquiavelismo', esto es, por la habilidad de usar la manipulación y falsificación de la verdad para conseguir el control del poder.
El creador de semejante barbarie fue Nicolás Maquiavelo, uno de los 'genios' del Renacimiento Italiano, considerado por muchos como el Padre de la Ciencia Política Moderna.
¿En qué consiste esta nueva concepción de la política?
Consiste en que, a diferencia de las convicciones precedentes, la política no puede estar sujeta a normas morales.
En tiempos de Maquiavelo, los príncipes heredaban o se tomaban el poder para ejercerlo por vida, lo que, obviamente, incluía la preocupación principal de conservarlo, pues siempre estaban amenazados por otros príncipes o candidatos a príncipes que procuraban arrebatárselo.
En tal contexto, Maquiavelo propone que la mejor defensa del poder es hacer un buen gobierno y obtener el cariño y el respaldo de la gente:
"La mejor fortaleza que un príncipe puede poseer
es el afecto de su gente".Pero Maquiavelo fue el consejero de los tiranos, sin consideración alguna por la condición del pueblo sometido. En ese bien entendido, los mayores consejos maquiavélicos están destinados a reforzar la eficacia en la conservación del poder:
– "Ante todo, ármate".
– "Si un príncipe quiere mantener su dominio, debe estar preparado para 'no ser virtuoso', y hacerlo o no de acuerdo con la necesidad".
– "Puesto que el amor y el miedo apenas pueden existir juntos, si debemos elegir entre ellos, es mucho más seguro ser temido que amado".
En nuestros días, el maquiavelismo siempre está presente en los regímenes totalitarios, mas ¿existe alguna posibilidad de que semejante concepción pueda funcionar en el sistema democrático?
Ciertamente. A consecuencia de la aceptación generalizada de que la política no tiene límites morales, han surgido espontáneamente dos manifestaciones 'maquiavélicas' conocidas como 'demagogia' y 'corrupción'.
• La 'demagogia', como arma principal de los políticos actuales, responde directamente a los consejos de Maquiavelo:
– "Todo el mundo ve lo que aparentas ser, pocos experimentan lo que realmente eres".
– 'El vulgo se deja seducir siempre por la apariencia y el éxito".
– "Es central saber disfrazar bien las cosas y ser maestro en el fingimiento".
En esencia, la demagogia oculta lo verdadero haciéndolo aparecer a conveniencia del demagogo y sus fines.
• La 'corrupción', en cambio, si bien está siempre implícita en el ejercicio del poder absoluto –sea del príncipe o de quien sea–, no parece haber formado parte de los consejos de Maquiavelo. Él era suficientemente refinado como para no caer en ese extremo.
Sin embargo, su visión política sin moral ha terminado por aceptar, incluso legalmente, el que los políticos se enriquezcan poniendo al servicio de otros, en forma encubierta, el ejercicio mismo de sus facultades políticas.
Esta capacidad de los políticos de poner en tela de juicio la honestidad de decir la verdad es uno de los mayores problemas de nuestra convivencia social. Ello significa que el 'maquiavelismo' está corrompiendo a fondo, al parecer sin remedio, la esencia del sistema democrático.
Y en tal contexto, la pérdida de confianza en el sistema que casi todos experimentamos a causa de este triste espectáculo de los políticos, nos está conduciendo – tal vez sin regreso – al abismo: la TIRANIA, al servicio de la cual siempre hay tiranos al acecho.
